El proyecto global para distribuir las vacunas contra el COVID-19 está teniendo dificultades para asignar más de 300 millones de dosis disponibles, en la última señal de que el problema de inmunizar al mundo ahora es más una cuestión de demanda que de oferta.
Problemas con la distribución
El año pasado, las naciones ricas aplicaron la mayoría de las vacunas disponibles para inocular primero a sus propios ciudadanos, lo que supuso que hasta ahora menos de un tercio de las personas en los países de bajos ingresos han sido vacunadas.
Sin embargo, a medida que aumentaron los suministros y las donaciones, las naciones más pobres enfrentan otros obstáculos como brechas en la cadena de frío, dudas sobre la inoculación y falta de dinero para apoyar las redes de distribución, según funcionarios públicos de la salúd.
Pocas solicitudes de suministro
En enero, COVAX, el programa global de vacunas dirigido por Gavi y la Organización Mundial de la Salud (OMS), tenía 436 millones de vacunas para asignar a los países.
Sin embargo, las naciones de bajos ingresos solo solicitaron 100 millones de dosis para su distribución para fines de mayo, la primera vez en 14 rondas de colocación en que la oferta ha superado la demanda, según el documento del Grupo de Asignación de Vacunas de COVAX.
Un portavoz dijo que COVAX ahora tenía suficiente suministro actual para satisfacer la demanda, pero reconoció que la distribución de las vacunas era un problema en naciones menos desarrolladas.
«Solo cerraremos la brecha de equidad en vacunas de una vez por todas si podemos ayudar a los países a aplicarlas rápidamente y a gran escala», dijo el portavoz.
Movimiento en el mercado
Las acciones de dos de los principales proveedores de vacunas, Moderna y Pfizer, cerraron ayer a la baja. En concreto Moderna cotiza a $144,97 (cayendo un -0,53%), mientras que Pfizer hace lo propio bajando hasta los $47,53 (-2,06%).
Fuente: Reuters